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Apr
Herencia musical
Autor: Estudiante Diana Constanza Acuña Guasca
Programa: Música
Materia: Humanidades II
Docente guía: David Carrascal
Fecha: Marzo 2017
Una de las cualidades del ser humano es su capacidad para adaptarse a una sociedad, es un ser cambiante, capaz de trasmitir sus valores y costumbres a través de diferentes medios de expresión, como la música. Hay que tener en cuenta, que la influencia musical que recibe un individuo desde su niñez determina claramente sus gustos, así, el núcleo y entorno social en que crece enmarcan su “Herencia Musical”.
Dicha “herencia” está representada por costumbres como: oralidad, tradición, entorno social y cultural. Así es como se forja un carácter, que a su vez determinará un estilo musical en el individuo. Conociendo la diversidad de costumbres y tradiciones de una sociedad, se puede afirmar que los estilos resultantes son bastantes, entonces, es predecible decir, que los “gustos” musicales de cada persona estarán determinados por la “herencia musical” que se le ha inculcado.
Es posible encontrar trasformaciones a dichos estilos, por ejemplo: la profesionalización de una carrera musical, que implica el reconocimiento de la historia, y de los estilos que han surgido a lo largo del tiempo, esto, con el fin de fortalecer el conocimiento, y así crear un carácter que contenga los argumentos y conocimientos para defender el estilo propio. Por otro lado, también está ese estilo propiamente autóctono, el que se nutre de la misma cultura, que sin necesidad de profesionalización es igualmente valioso, y conserva las raíces de una sociedad, para deleitar a todos por igual.
Son importantes las raíces; aquellas que denotan las características sociales y el origen cultural de una persona. Gracias a dichas raíces, habrá una identidad que recordar y reconocer, son importantes porque enriquecen las culturas, y fomentan el desarrollo de estilos nuevos y originales, por tanto, se puede concluir que entre lo más importante a la hora de hacer música está el gusto personal, aquel que se recibe, se aprende en la niñez y que se transforma a lo largo de la vida, debiendo añadir a esto, elementos claves como la disciplina, la dedicación y la constancia.
